La Basílica de San Pedro es probablemente una de las iglesias más impresionantes y bellas del mundo. No sólo es un lugar de culto para los fieles, sino también un santuario lleno de tesoros artísticos y un dechado de arquitectura barroca vaticana.

El edificio se terminó de construir en 1626 y tiene una superficie de más de 15 mil metros cuadrados. Con una capacidad para 2 mil personas es uno de los santuarios más importantes y visitados de la Iglesia Católica Romana.

La basílica y la plaza de San Pedro también son famosas por las bendiciones Urbi et Orbi que el papa imparte desde un balcón de la basílica el día de la Navidad y el día de Pascua, y que atraen a grandes multitudes cada año.