Curiosidades
Curiosidades
¿De dónde viene el nombre de las torres? ¿Sabes cuál es la creencia popular en torno a las puertas de Valencia? En esta sección podrás conocer algunas curiosidades y mitos relacionados con las Torres de Serranos, así como las múltiples funciones que ha tenido esta construcción a lo largo de los siglos.
El nombre
El término de Serranos o Serrans, en valenciano, proviene de los viajeros que utilizaban la puerta para entrar a la ciudad. De hecho, la puerta se encuentra en el extremo norte del casco antiguo. Los viajeros de la zona de la Serranía, también llamados serranos, solían ser los usuarios más habituales de esta entrada, por lo que la puerta y las propias torres pasaron a ser “de los serranos”.
La Serranía es una de las comarcas montañosas de la Comunidad Valenciana, está situada al noroeste de Valencia. El río Turia atraviesa esta región, fluyendo en varios tramos por estrechos desfiladeros, dando vida a bellos paisajes.
Posteriormente, el puente que se encuentra frente a la puerta adoptó el mismo nombre. El ahora llamado Puente de Serranos, data del siglo XVI. Sin embargo, algunos sostienen que en el mismo lugar había otro puente que databa de la época romana.
La luna de Valencia
Probablemente hayas escuchado a alguien utilizar la expresión “estás en la luna de Valencia” refiriéndose a quien está desconcentrado o distraído. Muchos creen que el origen de esta frase tiene que ver con las puertas de Valencia.
La creencia popular es que en el pasado, cuando las murallas de Valencia todavía estaban en pie y las puertas eran las únicas entradas a la ciudad, solía haber una especie de toque de queda. Esto significaba que las puertas se cerraban por la noche a partir de cierta hora.
Muchas personas distraídas y olvidadizas no llegaban a tiempo para entrar mientras las puertas permanecían abiertas, por lo que tenían que dormir afuera. En las calles, fuera de las murallas, la luna les miraba y les recordaba su despiste.
Una prisión para nobles
Entre los siglos XVI y XIX, las torres se utilizaron como prisión para los nobles. De hecho, aún se puede ver una campana en el lado sur de la puerta, el que da a la Ciudad Vieja. Esta campana se utilizaba para avisar a la población en caso de que un prisionero consiguiera escapar, lo que era más común de lo que se podría pensar.
Sin embargo, con el pasar de los años, el triste aspecto de las torres convertidas en prisión y las condiciones insalubres en las que se mantenía a los reclusos motivaron a los habitantes de la ciudad a protestar en repetidas ocasiones. Finalmente, los reclusos fueron trasladados a otro sitio en 1888.
Un refugio para el arte del Prado
Durante la Guerra Civil española las Torres de Serranos sirvieron como refugio de algunas obras de arte del Museo del Prado de Madrid, para lo cual fue necesario efectuar ciertas modificaciones a la estructura del monumento.
En primer lugar, las pinturas se colocaron en el nivel inferior, con la intención de mantenerlas seguras en caso de derrumbe o bombardeo. Se construyó una bóveda para resguardarlas, conformada por una capa de 90 centímetros de concreto reforzado, cubierta por un metro de cascarilla de arroz y otra de tierra.
En el segundo piso se colocó otro metro de tierra y la terraza se cubrió con sacos de arena. Por último, se instaló un sistema automatizado para controlar la humedad y la temperatura.
La Cridá
En la actualidad, las Torres de Serranos están abiertas al público, pero también se utilizan para algunos actos oficiales valencianos. El más famoso es la Cridà, la ceremonia oficial que marca el inicio de las fiestas de las Fallas.
El último domingo de febrero, la Fallera Mayor (la “reina” elegida de la festividad de las Fallas) declara el iniciode las fiestas desde una plataforma erigida frente al edificio.
Puede leer más sobre este evento en nuestro artículo sobre la Cridà.