Construido en el valle de Murcia, entre el monte Palatino y el monte Aventino de Roma, el Circo Máximo mide 600 metros de largo y 140 de ancho. Con una capacidad de unas 300 mil personas (seis veces más que el Coliseo), podía recibir a una cuarta parte de la población romana en esa época. Para que nos hagamos una idea de las dimensiones, el mayor estadio de fútbol del mundo, el Estadio Reungrado Primero de Mayo en Corea del Norte, tiene un aforo de 114 mil personas.

Una vez al año, el Circo Máximo se convertía en el escenario de un importante y popular festival, los Ludi Romani (juegos romanos). La fiesta se celebraba del 12 al 14 de septiembre (posteriormente se amplió para abarcar del 5 al 19 de septiembre) en honor del templo de Júpiter Óptimo Máximo. Los juegos eran organizados por los curule aediles (magistrados formales) e incluían carreras de carros, luchas de gladiadores, obras de teatro, carreras y luchas de fieras.

Hoy en día, las famosas pistas de carreras están cubiertas de hierba y no hay mucho más que ver. Después de unas investigaciones arqueológicas realizadas en 2016, este recinto se convirtió en un parque público que ocasionalmente se utiliza para conciertos y eventos.

Sin duda, el parque del Circo Máximo es un excelente lugar para tomar un descanso después de visitar los lugares de interés cercanos.